Cuando la señal de internet no llega a todos los rincones de tu casa u oficina, una de las soluciones más efectivas es instalar un repetidor. Estos dispositivos amplían la cobertura y permiten disfrutar de una conexión estable en más espacios. La buena noticia es que puedes configurarlos fácilmente desde tu celular, sin necesidad de conocimientos avanzados en redes.
Antes de comenzar, conviene entender qué es un repetidor de WiFi y para qué sirve. Básicamente, se trata de un equipo que recibe la señal de tu router y la replica para que alcance zonas donde normalmente no llega la conexión.
Existen dos maneras principales de configurar tu celular como repetidor WiFi: con las funciones que trae el sistema operativo o mediante aplicaciones externas.
La mayoría de teléfonos Android cuentan con la opción de compartir internet. No se trata únicamente de compartir datos móviles, también es posible compartir la señal WiFi que el teléfono recibe. Para configurarlo:
1. Ve a Ajustes > Redes e Internet > Zona WiFi o Compartir conexión.
2. Activa la opción de compartir WiFi.
3. Asigna un nombre y una contraseña a la red.
4. Conecta otros dispositivos a esa nueva red.
Este método es rápido, pero tiene limitaciones: la señal no es tan fuerte como la de un repetidor físico y el celular debe permanecer encendido y cargado.
Si tu dispositivo no permite repetir WiFi de manera nativa, existen apps como WiFi Repeater o NetShare que cumplen esa función.
Su uso es sencillo: una vez instaladas, generan una nueva red a partir de la existente. Al abrir la aplicación, se muestra un nombre de red y una clave, o bien un código QR que otros dispositivos pueden escanear para conectarse.
En algunos casos es necesario configurar manualmente un proxy en los equipos conectados, ingresando la IP y el puerto que la aplicación indique.
1. Instala la aplicación de tu preferencia desde Google Play.
2. Autoriza permisos de ubicación y conexión que la app requiera.
3. Crea la nueva red WiFi desde la app, copiando la contraseña que genere.
4. Conecta los dispositivos a esa red.
5. Verifica la conexión: si no funciona, entra a ajustes avanzados y configura manualmente la IP y el proxy.
Este proceso toma apenas unos minutos y no requiere conocimientos técnicos avanzados.
- No necesitas comprar un repetidor físico.
- Es una solución rápida en situaciones puntuales.
Funciona bien en espacios pequeños como un departamento o una habitación de hotel.
- La señal no es tan estable ni extensa como la de un repetidor dedicado.
- Consume batería rápidamente.
- No siempre es compatible con todos los dispositivos.
- Coloca el celular en una zona donde reciba buena señal del router.
- Mantén el teléfono cargado o conectado a la corriente.
- Usa esta opción como un recurso temporal: para mejorar de manera permanente la cobertura, lo recomendable es un repetidor WiFi físico o un router adicional.
Recuerda que la calidad de la conexión dependerá de la capacidad del celular y de la red de origen.
Convertir tu celular en un repetidor WiFi puede sacarte de apuros cuando la señal no llega a ciertas áreas, sobre todo si necesitas conectarte de inmediato y no tienes a la mano un repetidor convencional. Sin embargo, para un uso continuo y en espacios más grandes, lo más recomendable es optar por un repetidor físico o un sistema WiFi Mesh, que ofrecen mejor alcance y estabilidad.
En el mercado encontrarás distintas alternativas, desde modelos básicos hasta equipos con mayor capacidad. Puedes revisar la categoría de repetidores WiFi en Office Depot para ver todas las opciones disponibles.
Un ejemplo avanzado es el Sistema Inalámbrico WiFi Mesh TP-Link AX3000 DECO X55 2 piezas, que permite cubrir grandes espacios de forma uniforme y gestionar la red desde una app en tu celular.